
Parque Punta de Vacas 3, 4 y 5 de Mayo
- Encuentro Mundial de Inspiración Espiritual en la Cordillera de los Andes -
Ahí, donde muchos podrían decir que no hay nada. Ahí, en aquel lugar que a las capitales parece tan lejano y al turismo tan poco jugoso. Ahí, en ninguna parte, entre montañas milenarias y fronteras no tan viejas.
Ahí, hacia donde se dirigen viajeros de todas partes iCansado del adoquín mental, de la hora laboral, de los horizontes hipotecados ...siguiendo un rumor y un latido.
Avanzando por la Ruta 7, introduciendote en la cordillera de los Andes, entre los pueblos de los Penitentes y Uspallata, te vas a encontrar un recodo en el cruce de tres cordones montañosos y tres ríos, al pié de "el techo de occidente",, el gran Monte Aconcagua.
Ahí, justo ahí , encontrarás... un predio. Un descampado predio que, aunque totalmente abierto, es precedido por un extraño portal. Un portal sin cerco, ni enrejado ni guardián.
Del otro lado, en el centro, verás una construcción semiesférica y un cilindro metálico .
Un cartel dice: "Parque Punta de Vacas" . Cruzá el portal que te introduce en el terreno y sé bienvenido al centro de meditación y estudio mas extraño del mundo. Por que te advierto, que estas frente a algo único e indescriptible. Estás frente a un Faro construido para la humanidad.
Uno, de cinco en el continente.
Uno, de siete en occidente.
Uno, de nueve en el mundo.

Caminá hacía la gran semiesfera.
Acercate a una de sus entradas, y entra en ella. Entra en La Sala. Escucha el silencio. Observa el vacío de su interior... sentilo en tu interior. Cierra los ojos y aspira como si llevaras el aire a tu corazón... y pedi. Pedi con fuerza. Y recibi lo que te es dado. Lo que te es dado desde tu interior...Cuando hayas salido de la Sala observa a tu alrededor, por que tal vez ya no veas un predio, ni un cilindro, ni una semiesfera... por que tal vez no sientas que tu mirada sea la misma.Recorre aquel lugar. Toma de la fuente el agua que baja de las montañas. Respira el fresco aire. Observa el cielo con los ojos bien abiertos. Pone tu mano sobre el Monolito metálico y descubri tu reflejo en él. Habla con la gente que ha llegado al lugar, con los que salen de la Sala. Come algo que compartas con otros. Descansa y escucha el viento.Lee las palabras talladas en la Estela; palabras que se oyeron por primera vez hace treinta y ocho años en ese mismo lugar cuando solo era un punto descampado entre los ríos y la ruta que úne Chile y Argentina. Pedi a alguien que te guíe al Centro de Estudio... El centro occidental de La Escuela. Sigue a los demás peregrinos...Luego, retoma tu camino. Volve a tu ciudad con la frente y las manos luminosas. Volve al mundo del hombre, a su cotidiana tristeza, a su simple alegria. Y contale a tus desconocidos hermanos que allí lejos, entre montañas y fronteras, descubriste algo que no podras explicar con palabras.Deciles, que mientras crece en el mundo la desolación; mientras fortalecen sus celdas mentales los que temen, y avanzan las tropas televicibas sobre los pueblos; deciles que mientras todo cae, desde distintos puntos del planeta, se está disparando un misil mental. Y, que algo muy, muy grande comenzo a expresarse, y empezo a despertar de su letargo, al corazón del mundo humano.
IZQUIERDOS HUMANOS
Frente a las distintas formas de violencia que se ejercen cada día sobre los individuos y las poblaciones de todo el mundo, encontramos que las herramientas populares que tenemos para hacer frente al problema no son muchas. Los Derechos Humanos, por ejemplo, han sido durante décadas nues-tro único método legal para luchar contra el abuso de poder, la opresión, la tortura, la persecución, la censura, los crímenes de guerra, etc. Pero también para hacer frente al abuso cotidiano, domestico, laboral, sexual, religioso, moral, psicológico... para denunciar la explotación, la pobreza, la indigencia... en fin. Los Derechos Humanos ( D H ) hacen las de "Superman del humanitarismo". Algo similar ocurre con el pacifismo. Reactivado popularmente en los últimos años, este dejó muy en claro que la gente no quiere guerra, eliminando el discurso televisivo de "buenos y malos" (el que justificó mediáticamente toda guerra ), y eso no es poco. Pero también aquí encontramos las mismas dificultades a la hora de hablar de resultados. La función de los derechos humanos es la de denunciar las viola-ciones a los mismos. Se podría decir que del mismo modo en que el pacifismo pierde su sentido al no haber guerras, los D.H. solo cobran sentido en relación a la violación de dichos derechos (y sabemos que estos son violados en cada esquina). Si los resultados de los D.H. nunca son más que circunstanciales es por que su función se basa, principalmente, en denunciar y, en el mejor de los casos, en vigilar. Pero no acaban de ofrecer una solución real al problema de la violencia creciente en el mundo. Siempre recordando que fue una lucha ganada declararlos legales, y la importancia de ellos, también debemos atender a que no por nada son nuestra "Única herramienta legal" al respecto. A esta altura es necesario recordar cuantas veces Estados Unidos se embanderó en los DH para justificar sus violentas intervenciones en aquellos países en los que aún no ejercía un dominio total: Irak, por tomar el caso más cercano (o más presente). Y a pesar de todo, debemos hacer valer estos derechos y defender la importancia legal de sus organismos. Pero también debemos plantearnos la inminente superación de este horizonte. Sin necesiadad de ser estos los únicos e indiscutibles, encontramos la opción al problema, en estos puntos : 1)La superación de los Derechos Humanos sería encontrar una verdadera herramienta popular, transformadora de la violencia en el mundo. No-violencia activa frente a toda forma de violencia, en el plano social, domestico, personal o interno. 2)La superación del pacifismo sería recrear y profundizar el concepto de "paz", que hasta ahora solo significa "ausencia de Guerra" o cese al fuego, y eso no es lo que reclamamos cuando clamamos por la Paz. Por lo tanto, el mínimo reclamos inmediato es el desarme total y el abandono inmedia-to de los terrenos invadidos por las fuerzas de ocupación. 3)La superación del Humanitarismo sería una Rebelión Humanista No-violenta, por un revolución personal y mundial.
Convocamos por tanto a todo individuo u organización a formar ámbitos y espa-cios donde intercambiar, trabajar, practi-car y expandir estos puntos. Hagamos frente, al problema de la violencia, en sus raíces mas arraigadas.
"A esta altura me cuidaré de no mencionar a los derechos humanos, por q han sido vaciados en su conte-nido y falseados en su significado. Ahora resulta que se bombardea a las poblaciones indefensas para proteger sus derechos
humanos!" ... "Entre tanto, los que no somos escuchados trabajaremos a partir de hoy en todas partes del mundo para presionar a los que deciden, para difundir los ideales de paz en base a la metodología de la no- violencia, para preparar el camino de los nuevos tiempos." Silo. Punta de Vacas del 2004.
